No os confieis del que posa en la foto precedente, disfrazado con una vestimenta episcopal de un color grana chillon y ofensivo, como las mismisimas llamaradas del fuego dantesco.
Jugarretas del Maligno.
Mirad los rostros terribles de sus demonios acompanantes: tres se sonrien cachacientamente para engatusar a las pobres almas candidas con una fingida y feliz validacion de la ceremonia de Ordenacion de este diablo; y dos exhiben unas caras mas bien sombrias que pretenden ser solemnes. Se trata de un ritual maquiavelico en una sucursal serrana del averno.
Miradle los ojos aviesos al diablo impostor y reparad en su barbita cochinera que desprende chispas de azufre.
Que no os sorprendan, hermanos en la fe, y corred a la primera parroquia que encontreis y aunque hallareis al parroco oficiando felacion liturgica a un monaguillo de 9 anos, coged el hisopo de la sacristia y con el realizad 7 aspersiones ante esta maldita representacion de un demonio disfrazado de cura, una por cada uno de los pecados capitales.
Recemos todos juntos el rosario y loemos al Altisimo para que con su infinito amor y poder inserte virus letales en las computadoras de todo aquel que crea en la santidad del fementido enmascarado.
Ignacio, a nombre de don Tomas de Torquemada, Sacerdote de la Orden Dominicana, Confesor de S.M. Isabel La Catolica y Director de la Santisima Inquisicion
PD) Entre los ardides de este malevolo diablo esta su poder de evitar que les pusiera sus acentos en donde les corresponden a las palabras de este mensaje de advertencia, y es que lo he escrito, por la urgencia del tiempo, con un teclado en ingles. Amen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario